Batacazo en la Premier League: después de dos rápidos contragolpes y una gran efectividad, Wolverhampton acabó con el invicto del Manchester City al vencerlo 2-1 en el estadio Molineux.
Tras la eliminación en la Carabao Cup ante Newcastle durante la semana, el equipo de Pep Guardiola pareció recuperarse al principio. Dominando el balón y buscando el arco de José Sá. Sin embargo, a los 13 minutos, los Wolves quebraron al City.
Un balón perdido en el centro del campo llegó a los pies de Pedro Neto, quien corrió velozmente por el costado derecho, centró y Rubén Dias desvió el balón hacia su propia portería. No fue la primera vez que el City se encontró en desventaja, pero la presión ejercida por los locales bloqueó a las principales figuras de ataque. Ni Jeremy Doku ni Phil Foden pudieron abrir espacios por las bandas. Erling Haaland apenas recibió la pelota y Julián Álvarez se vio perdido entre las camisetas naranjas.
¿Qué hizo Wolves? Lo que les resultó: esperar para contragolpear y eso les alcanzó para inquietar a Ederson, no en cantidad, pero sí en calidad. Wolverhampton tuvo la profundidad que el City no pudo encontrar durante casi todo el partido.
Necesitaron una jugada de estrategia y una ejecución perfecta de Julián Álvarez para lograr el empate y darle esperanzas al líder, pero eso no sucedió, porque todo siguió igual. Los locales permitieron que los visitantes tuvieran la posesión y esperaron su oportunidad para atacar. No tuvieron que esperar mucho: tan solo ocho minutos después, otra rápida jugada por la banda, esta vez de Nelson Semedo, un centro largo detrás de los defensores, algunos rechazos en el área y el surcoreano Hwang Hee-Chan quedó solo para marcar el 2-1 que fue el resultado definitivo.
Simple y efectivo, así fue como Wolverhampton planteó el partido, siendo un rival que lucha por evitar el descenso, y esta vez, el Manchester City no pudo encontrar la respuesta. El equipo de Guardiola sufrió su primer derrota en la Premier tras seis victorias consecutivas y además podría perder la cima de la tabla si el Liverpool gana su próximo partido.
Definitivamente, ha sido la peor semana para Pep y sus jugadores desde el inicio de la temporada y ahora tendrán que cambiar el enfoque y prepararse para visitar al Leipzig el próximo miércoles en la UEFA Champions League.